Funciona con lámparas Philips ® libres de Ozono con longitud de onda de 254 nm. La radiación ultravioleta con esta longitud de onda ofrece una extraordinaria capacidad germicida sobre los microorganismos, incluidas bacterias, virus, hongos y esporas.

Las lámparas disponen de un recubrimiento especial que capta la radiación de menos de 200 nm, evitando así la formación de ozono en el aire y prolongando la vida útil de las lámparas hasta las 9000h.

La radiación UV-C es una solución desinfectante para el aire que puede contribuir a mitigar el riesgo de contraer una infección y que se ha utilizado ampliamente durante más de 40 años. Todas las bacterias y virus probados hasta la fecha (muchos centenares a lo largo de los años, incluidos diversos coronavirus) responden a la desinfección ultravioleta UV-C.

La calidad del aire que respiramos tienen una gran influencia en nuestra salud y bienestar. Todos corremos el riesgo de contraer y propagar infecciones y enfermedades, especialmente en lugares públicos muy concurridos tales como oficinas, fábricas, tiendas, bares o restaurantes, escuelas y en el transporte público.

Las lámparas UVC presentan un riesgo mínimo si no se usan correctamente. No se debe realizar el mantenimiento con los equipos encendidos. Deben protegerse los ojos y la piel para evitar daños por la luz y lesiones graves en estas partes del cuerpo. Ver instrucciones de uso.

Recomendamos a los clientes que tengan cuidado a la hora de seleccionar equipos y que soliciten pruebas de homologaciones de terceros u otros requisitos según corresponda.

Ninguno de nuestros equipos tiene intención de ser usado como dispositivo médico, por lo que no lo está regulado bajo ninguna legislación aplicable a este tipo de dispositivos.